domingo, 2 de noviembre de 2014

Aquí estamos otra vez, ya casi no recordaba lo que se siente. Puede que mis dedos hallan perdido agilidad (argh, estoy oxidado, las palabras no fluyen), pero quizá he ganado en circunvoluciones (o no, vete a saber, miro atrás y me veo más tonto hace tres días que hace tres años, al fin y al cabo hace tres años tenia la inocencia a mi favor, hoy, ¿cuál es mi excusa?)

Y si mis preciadas circunvoluciones me alejan del común de la humanidad, bienvenidas sean.

También he perdido en dramatismo lo cual es bueno y es malo, ya que también he perdido en romanticismo (no mucho, sigo siendo yo). Al fin, menos postureo y más alma (o eso creo), más inseguridad, más relativismo, menos pedantería (tal vez), más por mí y menos por vosotros (seguro que sabréis superarlo). Soy un poco más duro, no mucho, por desgracia, aunque pretenda serlo como el granito.

Esto siempre ha sido un ejercicio de egoísmo, por lo demás intentare mantenerme en una entrada al mes, como mandan las viejas tradiciones de este blog.





No hay comentarios:

Publicar un comentario