sábado, 26 de mayo de 2012

El hombre de arena

Cuando la luz cambia
al amanecer
todo se alza
- hay profundidad
en las sombras-

El Desierto tiene alma
y es de cristal
tan pura y fina
como la arena

El Desierto tiene alma
y es tan nítida
me habla de las dunas ardientes como brasas
y de las inabarcables llanuras pedregosas

El desierto es un hombre de arena
respira y corre junto al viento
late en el interior de cada nómada
y en las palmas de mis manos

Nuestras vidas se arrojan a un precipicio
para después rizarse
en una espiral de polvo
es la ley

Pero cuando vive
tiene luz propia
y se filtra entre las cenizas
de todo lo demás

Mientras
cerca de ningún lugar
- robusto
pero minúsculo-
un escarabajo ha tropezado
con un grano de arena

Ha caído de espaldas y
ya no se sabe levantar

El Desierto es un lugar perfecto
para morir.